La fuente de la vida
Todos los seres vivos necesitan de los aminoácidos como unidades esenciales para la formación de proteínas, enzimas y materiales de partida para la síntesis de otras sustancias.
Los aminoácidos son los componentes básicos de las proteínas, macromoléculas complejas que en las plantas realizan funciones estructurales, enzimáticas y hormonales.
Hasta hace poco tiempo, la única manera de promover la formación de aminoácidos en las plantas era através del sistema radicular, adiciónando fertilizantes inorgánicos en los que el Nitrógeno absorbido por las raíces se transforma en aminoácidos.
Este proceso requiere un alto consumo de energia que puede ser utilizada en otros procesos biológicos (floración, cuajado, maduración, etc).
Actualmente, se ha demostrado que la aplicación de aminoácidos y péptidos através de las hojas o del suelo, tiene un efecto favorable en la nutrición de los cultivos ya que proporcionan los enlaces clave para la formación de moléculas biológicas sin pasos intermedios para la síntesis.
Es muy interesante la aplicación foliar de aminoácidos y peptídeos debido a la rapidez de acción aunque en presencia de estreses que generalmente podrían reducir la actividad normal de las plantas.
Aplicados en fertirrigación, combaten la fatiga del terreno revitalizando y regenerando rápidamente la microflora, aumentando la mineralización de la materia orgánica y reduciendo el proceso de lixiviación de los nutrientes.
Utilizando materiales orgánicos selecionados y tecnología própria obtenemos productos capaces de satisfacer todas las necesidades de una agricultura moderna.